Páginas

jueves, 15 de julio de 2010

Los cinco mundos


¿Ya se ha acabado?, me pregunta Camila. ¿Por qué?, se queja Jubal. Y la noticia se va haciendo eco entre los demás niños y niñas del Taller.
-Beatriz, me dice Maca que te vas ¿A dónde? ¿Te vas de vacaciones?
-Yo no quiero que te vayas, dice Marta y se abraza a mis pantalones.

El Taller "Los cinco mundos" que he estado haciendo en la Biblioteca Pública de Santa Cruz con quince niños y niñas ha llegado hoy a su fin. Y la noticia ha sido un drama porque querían seguir construyendo sus mundos. Les entiendo. Sus mundos eran muy chulos.

En estos días de julio Macarena, Javier, Claudia, Oriana, Verónica, Emilia, Omar, Marta, Juan, Marcos, Jeimy, Andrés, Brayan, Camila, Jubal, Macarena y Pablo (que se sumó el último día) han construido cinco mundos distintos:


  1. La estrella de colores

  2. Ariala

  3. Sivierna

  4. Latami

  5. La isla de Saturno

Y el resultado ha sido:

  • Cinco idiomas distintos.

  • Un expulsado por los habitantes de La isla de Saturno, durante cinco minutos, según parece dijo dos tacos seguidos: guili... y jooo...

  • Hubo un inmigrante sin papeles que fue aceptado en el mundo de Ariala.

  • Una sola casa en el mundo de Latami donde los habitantes no se ponían de acuerdo.

  • Una hábil embajadora, Claudia del mundo de Sivierna, que en tres minutos ya sabía despedirse en cinco idiomas.

  • En La estrella de colores sus habitantes compartían las cinco casas y todo se decidía por votación democrática.

  • Lo mismo ocurría en Sivierna, me refiero a lo de la votación, en cambio solo tenían dos casas: una para las chicas y otra casa para los chicos. Eso sí, todos compartían una playa privada y un barco para trasladarse.

  • En Ariala levantaron un muro para mantener a raya a los monstruos.

  • En cuanto a la comida: a la mayoría les gustaba los palitos salados, y solo la mitad aceptaron el gengibre en azúcar como alimento comestible.

  • Lo malo: el espionaje salvaje.

  • Lo bueno: que a todos les gustaba su mundo.

  • Lo genial: lo mucho que nos hemos divertido.

Gracias a todos los niños y niñas por estos días tan mágicos y llenos de risas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Echa una guindilla